La terapia biomagnética también llamada terapia biomagnética de restauración del terreno o par biomagnético es una terapia natural y segura que restablece el medio celular normal a través del uso de pares de imanes. El objetivo es igualar el nivel de pH del organismo que está desequilibrado, un determinante crítico de la salud. El biomagnetismo consiste en aplicar imanes al cuerpo, con un poder bien definido de intensidad media, para equilibrar el pH en ciertas áreas del cuerpo que están energéticamente conectadas, y que resuenan entre sí, una es positiva-ácida y la otra es negativa-alcalina.

La admirable simplicidad de este sistema permite trabajar con imanes potentes pero inofensivos de diferentes formas a partir de los cuales se obtienen resultados sorprendentes. La terapia también se usa con éxito para encontrar el origen del problema de una persona, clasifica nuevas patologías que pueden tratarse, incluso si esas nuevas patologías no han desarrollado ningún síntoma aún. Además, la terapia se usa para prevenir enfermedades y síndromes crónicos, complejos y degenerativos específicos.

La experiencia clínica ha demostrado que la terapia biomagnética se puede utilizar para un gran número de afecciones y enfermedades complejas, incluyendo: asma y alergias, depresión, trastornos del metabolismo, tratamiento del insomnio, alteraciones de la piel, problemas hormonales, dolor agudo y dolor crónico, problemas de comportamiento. Por otro lado, el desarrollo de la enfermedad no puede desarrollarse con un nivel de pH equilibrado, la terapia biomagnética neutraliza el pH y, por lo tanto, directamente el entorno de vida de los microorganismos causantes de la enfermedad.

Esta terapia es segura, se puede aplicar a pacientes de todas las edades y es perfectamente compatible con cualquier otra práctica tradicional o alternativa. Y solo debe usarse con precaución en el caso de pacientes con marcapasos (para no agotar la batería), mujeres embarazadas y pacientes que se han sometido a quimioterapia.